Imagina a una persona que siente angustia y que va a consultar a cuatro psicoterapeutas distintos para entender qué le ocurre. El primero le dice que presenta un conflicto no resuelto entre algunos mecanismos de defensa y ciertos impulsos libidinales (corriente psicodinámica). El segundo, que su angustia representa una conducta disfuncional aprendida y reforzada por ciertas creencias irracionales (corriente cognitivo-conductual). El tercero, que tal persona carece de un sentido de vida, lo que limita su tendencia inherente a la autorrealización (corriente humanista). El último, que su angustia es una manifestación particular e interaccional del sistema del que es parte (corriente sistémica). Pero ¿quién tiene razón? Todos y ninguno.
Dieser Download kann aus rechtlichen Gründen nur mit Rechnungsadresse in A, B, BG, CY, CZ, D, DK, EW, E, FIN, F, GR, H, IRL, I, LT, L, LR, M, NL, PL, P, R, S, SLO, SK ausgeliefert werden.