Olda Cristela Rivera Medina

basta a cada dia su propio mal

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Produktbeschreibung

En un mundo lleno de incertidumbre, ansiedad y preocupaciones constantes, "Basta: A cada día su propio mal" nos invita a soltar la carga del mañana y vivir con confianza en el presente. A través de una profunda reflexión basada en principios bíblicos y experiencias de la vida, este libro ofrece una guía para afrontar los desafíos diarios con fe, resiliencia y paz interior. A lo largo de sus páginas, el lector descubrirá cómo las Escrituras nos enseñan a no temer, a encontrar esperanza en medio de la adversidad y a comprender que, aunque las pruebas sean inevitables, no estamos solos en nuestro caminar. Con un enfoque inspirador y práctico, este libro es ideal para quienes buscan: - Fortalecer su fe en tiempos difíciles. - Superar el miedo y la ansiedad con herramientas espirituales. - Vivir con paz y confianza, dejando de lado la preocupación constante. - Comprender el propósito de cada prueba desde una perspectiva bíblica. Si alguna vez has sentido el peso del futuro sobre tus hombros, este libro te recordará que cada día trae su propio desafío, pero también su propia gracia y fortaleza. Hoy es el día para decir 'basta' a la ansiedad y empezar a vivir con propósito.

Produktdetails

• Verlag: Oldy
• Seitenzahl: 124
• Erscheinungstermin: 4. April 2025
• Spanisch
• Abmessung: 280mm x 216mm x 7mm
• Gewicht: 334g
• ISBN-13: 9798227390752
• Artikelnr.: 73823972

Autorenporträt

Nací el 2 de Abril de 1956, en el pueblo de Penonomé, en la Provincia de Coclé, de la República de Panamá. Mis hermanos y Yo fuimos hermosamente cuidados por nuestros abuelos maternos mientras mi madre laboraba. Obtuve mi título universitario de Licenciatura en Farmacia, el primero de Octubre de 1980, donde me entregaron una medalla y el diploma precisamente era el cumpleaños de mi madre, lo que resultó ser un obsequio de mi parte por sus grandes esfuerzos y así prodigarme todo lo que necesitaba para que Yo lograra la meta. Laboré como farmacéutica por 44 años en la Caja de Seguro Social y allí me jubilé. Desde mi primer año en la universidad, una compañera( hoy día colega), me presentó al Señor Jesucristo y lo acepté como mi salvador y el Señor en mi corazón y ha sido una maravillosa aventura en mi vida y la de mi familia.