Los ácaros se conocen en Egipto desde principios del siglo XIX, mientras que las garrapatas se conocen desde la época de los antiguos egipcios, ya en 1550 a. C. El pequeño tamaño de los ácaros es la causa de la escasa información disponible sobre ellos. Por lo tanto, los especímenes deben montarse en portaobjetos microscópicos y estudiarse con aumentos de hasta mil diámetros. Además, las técnicas no son las mismas que las utilizadas en diversas ciencias zoológicas, aunque se toman prestados muchos métodos especiales tanto de la zoología como de la entomología. Los ácaros no son lo suficientemente pequeños como para manipularlos como protozoos ni lo suficientemente blandos como para tratarlos como gusanos, y son demasiado pequeños para estudiarlos como insectos. El presente estudio se centrará en: 1. Estudio de los taxones de ácaros del suelo en dos tipos de suelo (arenoso y arcilloso) bajo la misma rotación de cultivos. 2. Estudio de la densidad de población de los ácaros del suelo en ambos tipos de suelo bajo la misma rotación de cultivos. 3. Estudio de la densidad de población de los ácaros del suelo en diferentes cultivos en suelo arenoso. 4. Estudios biológicos y morfológicos sobre el ácaro astigmático del suelo Histiogaster bacchus, registrado por primera vez en Egipto. 5. Demografía de Histiogaster bacchus.
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