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Los ciclos solares débiles ocupan el máximo y el mínimo de los ciclos de Wolf-Gleissberg e inducen cambios climáticos que provocan subidas repentinas de los lagos de África Oriental. La subida repentina de 1962-64 ocurrió en la interfase de los ciclos 19-20. El ciclo 20 es débil. El período de ciclo solar débil de 1878-1922 comenzó con la subida repentina de los lagos en 1878 debido al ciclo 12. La subida y bajada cíclicas de los lagos se produjeron debido al forzamiento de los ciclos solares 13-15. La subida repentina de 1997 se debe al ciclo débil 23. Las observaciones de los satélites…mehr

Produktbeschreibung
Los ciclos solares débiles ocupan el máximo y el mínimo de los ciclos de Wolf-Gleissberg e inducen cambios climáticos que provocan subidas repentinas de los lagos de África Oriental. La subida repentina de 1962-64 ocurrió en la interfase de los ciclos 19-20. El ciclo 20 es débil. El período de ciclo solar débil de 1878-1922 comenzó con la subida repentina de los lagos en 1878 debido al ciclo 12. La subida y bajada cíclicas de los lagos se produjeron debido al forzamiento de los ciclos solares 13-15. La subida repentina de 1997 se debe al ciclo débil 23. Las observaciones de los satélites altimétricos nos permitieron ampliar nuestro estudio a varios lagos de África Oriental y también estudiar el forzamiento del ciclo 24. El forzamiento solar depende de la ubicación y el tiempo. Las subidas repentinas de los lagos en 1878 y 1997 se atribuyen a fenómenos muy fuertes de El Niño seguidos de fenómenos muy fuertes de La Niña. La subida de 1962 se atribuye al índice negativo de las Oscilaciones del Atlántico Norte (NAO).